5 beneficios de estudiar leyendo en voz alta

Estudiar unas oposiciones de justicia no es para cualquiera; necesitas identificar exactamente qué puesto de funcionario quieres, elegir una buena academia y por supuesto, ser persistente a la hora de hincar los codos.

Sin embargo, si hablamos de esto último, y más exactamente de técnicas de estudio, encontramos que cada maestrillo tiene su librillo. Hoy en Tu Plaza hablaremos de si es mejor estudiar leyendo en voz alta o en silencio.

Sabemos que ambos métodos de estudio tienen sus pros y sus contras. Mientras que leer en silencio potencia la memoria visual, estudiar en voz alta involucra más sentidos y partes del cerebro.

En concreto, veamos los 5 beneficios de estudiar en voz alta:

• Se activa la memoria audiovisual.
• Los conocimientos se afianzan al expresarlos en nuestra propia voz.
• La información permanece durante más tiempo en nuestra memoria.
• Te aseguras de que entiendes mejor lo que estás leyendo.
• Se presenta la oportunidad de crear conversaciones con uno mismo, en aras de comprender mejor la información.

Es por eso que en muchas oposiciones se ha de “cantar” los temas. Y no, recitar en voz alta la Constitución Española, no se hace por amor al arte.

Los últimos experimentos científicos al respecto avalan este hecho. En concreto, unos investigadores de la Universidad de Waterloo publicaron “Los Beneficios de Escucharse a Uno Mismo”, rompiendo una lanza a favor del estudio en voz alta.

Pero tenemos que hacer una salvedad. A la hora de darle al temario de las oposiciones de justicia, no podemos conformarnos con un solo método de estudio.

Y es que como dijimos antes, también hay muchos estudiantes que prefieren leer en silencio. Esto también tiene alguna que otra ventaja, sobre todo a la hora de hacerlo en una biblioteca o algún otro sitio con más personas.

Y lo mejor de estas maneras de retener la información, es que las puedes combinar. Por ejemplo, puedes hacer un primer barrido del temario de manera silenciosa, y después a la hora de estudiar más a fondo, recurrir al estudio en voz alta.

En definitiva: no hay una sola manera de estudiar las oposiciones. Puedes recurrir a uno u otro método sin ningún problema.